La realidad ésta temporada no nos dice otra cosa que nuestro
Sevilla FC, en partidos puntuales, es capaz de hacer lo que nadie espera, pero después
vuelve a una mediocridad inexplicable. Es difícil que todos los partidos lo
juguemos como la pasada jornada, pero que la actitud y la disposición del
equipo varíen tanto de un partido a otro, así como cuando jugamos en nuestra
casa y luego lo hacemos fuera, son cosas que difícilmente puede entender la afición
sevillista.
Si hace siete días, no sólo elogiábamos la actitud de
nuestros jugadores, así como el gran partido realizado por éstos ante nuestro
eterno rival, en la jornada de hoy, en el Vicente Calderón, ante el Atlético de
Madrid, le damos la vuelta a la tortilla. Ni actitud, ni disposición, ni juego,
nada de nada. Si a esto le sumamos la desgracia del penalti y la expulsión en
los primeros compases del encuentro, pues poco más se puede contar. Si ya difícil
era por tener en frente a un rival que se encuentra en estado de gracia, si
además, hay otros factores que se le suman para encarar el encuentro pues se
acabó. Hace una semana destacábamos a todos los jugadores que participaron en
la victoria, y hoy no podemos mencionar ni siquiera a uno.
A la bochornosa derrota cosechada en ésta jornada, hay
sumarle dos contratiempos más para el siguiente encuentro liguero, y es que no
podremos contar con jugadores como Fazio y Rakitic, los dos vieron la tarjeta
roja en ésta nefasta cita en la capital del reino, y Spahic vio la quinta
amarilla. Luna también fue expulsado estando éste en el banquillo.
A la vuelta de la esquina nos encontramos con la vuelta de
los dieciseisavos de copa del Rey, en tierras catalanas y ante el Espanyol. Una
eliminatoria encarrilada, pero que hay que solventarla. Seguidamente el próximo
lunes nos visita el Real Valladolid, y el camino hay que enderezarlo.
VAMOS MI SEVILLA, VAMOS CAMPEON.
2 comentarios:
El resultado.para mi es lo de menos fran.se te corta el cuerpo con esa grada de mierda que no respeta
El resultado.para mi es lo de menos fran.se te corta el cuerpo con esa grada de mierda que no respeta
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