domingo, 22 de abril de 2012

EL QUIERO Y NO PUEDO


Tras el pitido final, con la moral algo baja, no nos queda otra que mirar de reojo el resto de la jornada y cruzar los dedos para que nos sea propicia. Es lo que pasa cuando no hacemos nuestros deberes, dependemos de lo que haga el resto. Seguimos desaprovechando cada tren que pasa por delante de nosotros, no somos capaces de engancharnos y la imagen que muestra el equipo tampoco da margen al optimismo. Mal vamos si por cada mínimo revés bajan los brazos.

Comenzaba el encuentro algo convulso con una original y justísima protesta del lado del mágico gol norte. Una protesta unánime donde se plasmó con el lanzamiento de una gran cantidad de pelotas de tenis, interrumpiendo así el partido, España entera no sólo vio sino que escuchó la protesta de una afición harta de tanta mamarrachada de Madrid-Barsa, Barsa-Madrid, el colmo llega hasta el punto de retrasar un encuentro, el que se disputó anoche en nuestra casa por la sencilla razón del hastiado e inacabable partido del siglo, ¡¡¡BASTA YA!!!. Centrándonos en el encuentro, podemos decir que una vez más la suerte nos fue esquiva. Es cierto que tras el empate del Levante UD (que para colmo el gol del empate lo hace un jugador que le paga nuestro Sevilla FC, una más para hacérselo mirar), el equipo parece perder el norte y bajar los brazos, una vez más y tal como ha sucedido en demasiados encuentros, al mínimo revés el equipo pierde los papeles, se va del partido. El Levante si hacer mucho se llevó demasiado premio. No sólo un gran Negredo en racha puso el marcador a favor, sino que a falta de cinco minutos para el final tuvo en sus botas el gol de la victoria desde los once metros, finalmente Munua paró el penalti y todo quedó igual. Y cuando decimos que la suerte nos fue esquiva no sólo nos referimos al penalti errado, sino también a un posible gol fantasma, a dos cambios en defensa, obligados por lesión o fatiga (Escudé y Cala), el cual no te da margen de maniobra para reforzar el ataque, y una serie de circunstancias que no satisfacen a nadie.  Del partido destacamos el estado en el que se encuentra Negredo, y la buena imagen mostrada por Deivid.

Como hemos indicado anteriormente, sólo queda cruzar los dedos y que el resto no sumen más de lo que puedan hacerlo. No olvidemos la difícil visita de la próxima semana en el Bernabeu. Todo puede pasar en el fútbol, pero no es momento para ser iluso, no nos queda otra que centrarnos en las tres últimas jornadas y entre ellas el derbi…

VAMOS MI SEVILLA, VAMOS CAMPEON.


4 comentarios:

Anónimo dijo...

La verdad, no sé como tienes ganas de comentar todavía, a estas alturas.

FRANK dijo...

Es cuestión de ser sevillista, somos sufridores por naturaleza...ahora y siempre SFC...

Anónimo dijo...

Ser sevillista es la esencia.Ganar o perder es un complemento.
Manuel.

FRANK dijo...

no se puede decir mejor Manuel ;)