Cuando un árbitro se proclama protagonista de un partido,
mal empezamos. Porque casi siempre el perjudicado es nuestro Sevilla FC. Penaltis
que sólo ve el tío de la gomina. Expulsiones que no vienen a cuento de nada,
manipulación del acta. ¿Habremos tocado techo con el arbitraje nacional, tras
la actuación del tío de la gomina?, probablemente no. Pero es curioso, resulta
que dos árbitros, dicen que los dos mejores (U.Mallenco y M. Lahoz) conocen lo
que es la nevera, ambos por perjudicar a nuestro Sevilla FC, que raro no, y
ahora llega el tío de la gomina, y la lía. ¿Irá a la nevera? Esperemos que si,
aún siendo conscientes de que la puñeta ya está hecha. Pues nada a éste camino
van a tener que comprar algo más grande que una nevera, porque el arbitraje
nacional es de traca.
Llegábamos a Cornellá con la necesidad imperiosa de sacar la
victoria. Pero se cruzó por medio el tío de la gomina. El equipo era consciente
de la importancia del encuentro. Desde
el inicio se hicieron con la manija del partido. No arrollábamos en el juego,
pero si lo dominábamos. Era ese típico partido que sabía que tarde o temprano
caía el gol y nos terminábamos trayendo los tres puntos. Pero llegó la
expulsión de Reyes, y evidentemente con uno menos, la pizarra se te cae encima.
Era difícil, pero oye, jugar con uno menos no es siempre sinónimo de perder.
Claro que al regalito del tío de la gomina, le sumamos nosotros uno más, porque
jugar con uno menos no significa que nos hagan un gol (el segundo de los
pericos) como el que nos hicieron a balón parado. Conforme iban pasando los minutos
el equipo se lanzaba hacía arriba a la desesperada y finalmente conseguimos
salvar justamente el empate. Y nos quedamos con la sensación de que con 11 en
el terreno de juego podíamos haber conseguido mayor premio.
Un punto que sumamos a nuestro casillero. Un punto que sólo
se daría por bueno si la siguiente jornada, en casa y ante el Málaga CF consiguiéramos
la victoria. Un punto que no nos saca del terreno pantanoso donde nosotros mismos
nos hemos metido.
VAMOS MI SEVILLA, VAMOS CAMPEON.
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