La estocada la dejamos para dentro de siete días. Nos
presentamos en el Ciudad de Lepe con la mente puesta en los menos habituales
para saltar al terreno de juego, pero con los pesos pesados en la recamara por
lo que pudiera ocurrir. Porque a veces una pequeña relajación propia ante la
ilusión del nada que perder y mucho que ganar hacen se te puede complicar las
cosas por falta de previsión.
Quizás el gol tempranero del gran Kanoute hiciera que el
equipo se relajara teniendo en cuenta lo que se nos avecina el próximo sábado.
La primera mitad del encuentro se limitó en el gol que nos ha dado la victoria
y que tuvimos que contener a un San Roque de Lepe cuya ilusión les hizo
crecerse más de la cuenta. En los segundos 45 minutos la cosa iba a pintar de
otra manera. Charla técnica en el descanso para no caer en confianzas y errores
que nos cuesten caros, y el equipo saltó al tapete verde con otra actitud.
Fuimos dueño y señor del juego, creamos numerosas ocasiones que pudieron hacer
que el resultado fuese más llamativo y todo quedó en la mínima. Había que ganar
y se ganó. Los nombres propios del partido podíamos decir que fueron Luna y Armenteros.
Quedan los 90 minutos de la vuelta. Partido donde esperamos
no haya sorpresa alguna, no debe haberlas. Partido de vuelta para refrendar el
pase a la siguiente eliminatoria y esperar rival. Pero antes, ya sólo queda en
ver venir al Real de Madrid antes del parón liguero por la Navidad, partido de
alturas, de exigencias donde hay que dar el todo por el todo…partido a partido.
VAMOS MI SEVILLA, VAMOS CAMPEON.
1 comentario:
En copa hemos tenido muchas sorpresas confiemos en tener la suerte de nuestro lado.
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