Cuando la cuarta plaza se complica cada vez más, debemos ir pensando en no desperdiciar los puestos que dan acceso a la Europa League. El empate cosechado en tierras baleares hace que se nos complique aún más de lo que estaba el poder alcanzar al Villarreal. No precisamente por el empate, que seguimos sumando, y esto siempre es bueno, pero cuando lo que quieres es conseguir la machada de remontar más de 9 puntos, pues la cosa pinta de otra manera. Éramos conscientes de que era muy difícil conseguirlo, y a pesar de que todavía podemos, debemos de ir cuidándonos de los que vienen por detrás.
Del encuentro ante el RCD Mallorca, podemos decir que tiramos la primera parte, a pesar de llegar a tener una posesión de balón de hasta el 75%, pero nuestros propios errores nos costaron demasiado. Tras conseguir el empate, el equipo perdió el norte y fue dejándose dominar por un rival que poco hizo para llevarse tanto en los 45 primeros minutos. A pesar de conseguir ponerse por delante a falta de dos minutos para la conclusión de la primera mitad, el llamado gol psicológico, poco le serviría al conjunto entrenado por Laudrup, puesto que nuestro glorioso, salía en la segunda mitad como un toro, y en los primeros 10 minutos bien pudo hasta remontar el resultado, la fortuna no estuvo de nuestro lado cuando Negredo tenía la mejor ocasión al comienzo de la reanudación del encuentro, y hizo lo más difícil que era sacar el balón fuera cuando todos cantábamos gol. Conseguimos empatar, seguíamos dominando el juego, aunque el Mallorca a la contra le hacía mucho daño. Mucho pundonor ante un rival que iba de más a menos, que terminó desfondado y que en el tiempo de descuento, Varas salvaba el empate y Rodri tuvo la ocasión de hacer la victoria.
VAMOS MI SEVILLA VAMOS CAMPEON
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