BIENVENIDOS DE NUEVO…A MAGICO NERVION

Es cierto que nadie es imprescindible en nuestro más que centenario Sevilla FC. Pero igual de cierto es que sin la magia del gol norte, nuestro estadio no es el mismo. Durante la ausencia de la hinchada de Biris Norte bien se ha reflejado. Una vez enterrada las hachas de guerra. Una vez que el río vuelve a su cauce, en la noche del viernes, la bombonera de Nervión rugió como nunca tuvo que dejar de rugir…volvió nuestro mágico Nervión, y que nunca más falte.

Tanto nuestro glorioso Sevilla FC, así como el Deportivo de la Coruña llegaban a ésta jornada con la necesidad imperiosa de salir victorioso. Finalmente los tres puntos se quedaron en casa, en un encuentro donde sólo peligró el resultado cuando nuestro Sevilla FC se lo permitió al rival. Fuimos muy superiores ante un débil colista, ésta vez no resucitamos a nadie. Nos bastó los primeros 45 mínutos para dejar el partido encarrilado con un 3-1 a nuestro favor. Con  Rakitic y  Medel por partida doble, se convirtieron en los goleadores de la noche. Nuestro Sevilla FC volvió a demostrar la superioridad cuando le corresponde hacerlo. De los once futbolistas rojiblancos que saltaron sobre el césped desde el inicio, sorprendió la aparición del canterano Alberto Moreno, el cual cuajó un grandísimo partido. Como jugadores a destacar del encuentro lo haremos con el croata Rakitic, el cual se encuentra en un estado de forma excepcional, el chileno Medel convertido en bigoleador, y otro que desde su llegada está en boca de todos los sevillistas en cada partido, no es otro que el guardameta portugués Beto…el gato de Nervión. Un Beto que gracias a sus intervenciones, hizo que no pasáramos demasiados apuros en el marcador.

Supimos resarcirnos de la pasada goleada cosechada en el Bernabeu. Afrontamos éste encuentro con la importancia de saber la dificultad que entraña el próximo envite, nada más y nada menos que visitar el Camp Nou. Tres puntos que nos deja en la mitad de la tabla y subiendo escalones. Ante el Barsa, la cosa es complicada. Una vez pasado la alta montaña, no queda otra que afrontar cada jornada como si de la última se tratase. Todo esto sumándole que quien sabe si estaremos en una nueva final.

VAMOS MI SEVILLA, VAMOS CAMPEON.